Veo estos días El cuarto poder. Es la serie de cuatro capítulos, dirigida por Liz Garbus, que trata sobre la conflictiva relación entre el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y el periódico The New York Times. Desde su elección, el Times es el vigilante más crítico del Presidente norteamericano. El documental analiza el conflicto desde la perspectiva del diario.
En diversas comparecencias públicas, Trump se ha referido a la prensa como fabricante de noticias falsas. Del Times ha dicho que está acabado o en declive. Parece ser, si no una constante, una presión (o forma de represión) recurrente.
El truco de oratoria de Trump no es nuevo. En el 150 a.c., el senador romano Catón el Viejo finalizaba todos sus discursos con Delenda Carthago est («Cartago debe ser destruida») incluso cuando no era necesario decirlo. A fuerza de ser repetida, ya sabemos, una idea es asumida por los públicos objetivo, aunque éstos tengan dudas razonables sobre si es cierta o no. Una variante es lo que la gente llama ilusión de verdad, concepto relacionado con la memoria implícita. Es decir: los públicos tienden a tomar como cierto un hecho del que ya han oído hablar antes aunque no tengan constancia de que sea real.
En el documental, algunos trabajadores del diario se confiesan contrariados con los funestos y malintencionados augurios de Trump. Incluso el director, Dean Baquet, se muestra más preocupado de lo normal por el futuro de The Gray Lady.
En realidad, el propio documental es una de las respuestas que, como institución, da The New York Times a Trump. Tampoco es una respuesta nueva, pues tiene base, por ejemplo, en los documentales industriales de Ermanno Olmi hizo en la década de los 50 para la Edison Volta (gracias, Gabriel Domenech, por descubrirme al cineasta italiano).
Sea como fuere es una respuesta del periódico es demoledora porque:
- Es atemporal
- El documental está muy bien realizado técnicamente
- Tiene diversos niveles de profundidad para llegar a diversos públicos
- El periódico se muestra crítico con el presidente de los Estados Unidos, pero también autocrítico.
- Se convertirá en un documento de culto. Y a quienes somos periodistas (o lo hemos sido) nos encanta.
- En el documental, Baquet da una pista de cómo será el nuevo Times y, por ende, de toda la profesión: son necesarias plantillas más grandes de periodistas que sean también expertos en el manejo de las herramientas audiovisuales. Como contrapartida: se debe recortar el presupuesto en editores.
En España, El cuarto poder puede verse en Movistar+.