La identidad visual corporativa (IVC) tiene un valor estratégico fuera de toda duda en la creación y en el mantenimiento de la Imagen Pública de una empresa. Transmite señas de identidad e intangibles, elementos fundamentales para que una entidad se diferencie de su competencia.
Ahora bien, cabe preguntarse si la IVC es realmente útil en una profesión tan específica como la abogacía, basada en la discreción y en el secreto profesional, y en la que la Publicidad, en todas sus formas, está sujeta a un estricto marco legal.
Acabo de publicar en la revista Área Abierta (Dpto. Comunicación Audiovisual y Publicidad I, Facultad de CC. de la Información de la Universidad Complutense de Madrid) un artículo que pretende arrojar luz sobre este asunto mediante el análisis de un caso práctico: la identidad visual corporativa del bufete Garrigues.
Si quieres leer el artículo completo (en pdf) pulsa aquí. Puedes visitar también el último número de la revista pulsando este otro enlace.
Excelente artículo que ha ido directo a mi twitter para que se difunda. Gran ejemplo.
1abrazo
Muchísimas gracias, Roberto. Un abrazo para ti también.
He leído tu artículo y, la verdad, me ha encantado. Pero me queda una duda, ¿consideras que una empresa de este tipo realmente debe echar mano de la publicidad?
Yo creo que sí debe tener IVC para ser reconocida y diferenciarse de los demás, pero tu afirmación del 2º párrafo del post me hace cuestionarme si debería utilizar más medios publicitarios.
Un saludo!
Hola, Nuria. Gracias por tus amables palabras.
En el segundo párrafo del post, más que afirmar, intento «lanzar un guante» para que sea recogido por el lector interesado en este asunto.
Personalmente, creo que la política de Imagen Pública que llevan la mayoría de los bufetes es la correcta: dejarse ver sólo lo justo en ocasiones determinadas. Así lo quieren los propios clientes y así es el oficio de la Abogacía. Estoy en contra de que la Publicidad, tal como todos la conocemos, sea un arma comunicativa de los abogados. Entre otras cosas, porque la Publicidad puede conllevar un «vedettismo» (perdóname la expresión coloquial) que podría hacer mucho daño a la Abogacía como profesión.
En este sentido, la IVC, creo, es el vehículo idóneo para que un despacho de abogados transmita los intangibles de la Institución.
No sé si te he respondido a la pregunta…
Sí me s respondido y estoy totalmente de acuerdo contigo. Un saludo!
hola juan pedro, buenas noches !
tengo una pequeña preguntilla, ojalá puedas contestarme . . . cuáles son algunos de los clientes más importantes para los que Garrigues Abogados trabaja?
muchas gracias , espero tu respuesta .
Hola, Carlos.
Desconozco esa información. Los bufetes son, lógicamente, celosos guardianes de su cartera de clientes.
Un saludo
Muy bueno el articulo realmete te felicito…
Gracias, gaston. Pásate cuando quieras por este blog. Es tu casa.