La fiebre, Moncloa: cuatro estaciones; Los idus de marzo, El gran hackeo, El cuarto poder o Ted Lasso. Estas son algunas películas, series y documentales que suelo recomendar en clase.
La fiebre. (La fièvre, Eric Benzekri y Ziad Doueiri, 2023). Me la recomendó Álvaro. Durante una entrega de premios, un conocido futbolista agrede a su entrenador en lo que parece un enfado por motivos racistas. La opinión pública se polariza y aquello que en principio sólo era fútbol esconde una verdad más oscura, que va más allá incluso del racismo. Para los amantes de la comunicación de crisis, la lucha contra la desinformación y la formación de la opinión pública.
Lo que más me gustó: Refleja vivamente las conversaciones y matices de un comité de crisis. No cabe duda de que los guionistas se han documentado bien. La serie transmite a la perfección que para tomar buenas decisiones hay que trabajar primero el análisis de datos. De esta forma, los focus group, las encuestas, la analítica de redes sociales, etc., son elementos que se repiten en el argumento, pero con todo el sentido. La historia hace hincapié, también, en que un buen consultor debe tener una cultura general amplia, por encima de la media, para comprender situaciones, prever escenarios y empatizar con sujetos. Las referencias a novelas y ensayos con frecuentes.
El ritmo narrativo es óptimo, la fotografía es muy buena y los actores hacen un trabajo magnífico.
Lo que menos me gustó: Nada. Es perfecta.
Moncloa: cuatro estaciones: Episodio 3 – Otoño. (Curro Sánchez Varela, 2024). Moncloa: cuatro estaciones es un documental de cuatro capítulos que analiza la Presidencia del Gobierno de España tomando como base metafórica el Palacio de La Moncloa. El capítulo 3 está dedicado al aparato de Comunicación Institucional que rodea al Presidente, Pedro Sánchez. Muy recomendable para todas las personas a las que les gusta la comunicación institucional y política, independientemente de a qué partido voten.
Lo que más me gustó: Se evidencia que en la comunicación institucional nada se deja al azar y que hay un importante trabajo previo en todas las acciones comunicativas de Presidencia del Gobierno. Importante equilibrio entre profesionales de distintas generaciones y perfiles. Se encuentran pequeños tesoros en forma de testimonios. Por ejemplo: una de las personas encargadas de la comunicación directa con la ciudadanía explica que su función es tomar datos para convertirlos en análisis y que éstos ayuden a tomar mejor las decisiones.
Lo que menos me gustó: No se aprecia autocrítica por ninguna parte, y, quizá por eso, el documental tiene cierto aire a propaganda. Hay guerras de comunicación que existen y que son evidentes, pero como no se las menciona son como el famoso elefante en la habitación. El Presidente asegura: «Hay un momento en el que te das cuenta en que lo que se debate en los medios tiene poco que ver con las principales preocupaciones de los ciudadanos». Entonces, si es así, ¿por qué se obsesiona, precisamente, con los medios de comunicación?
Los idus de marzo. (The idus of march, George Clooney, 2012). Crítica mordaz al marketing político. Un clásico para comprender la comunicación (a menudo venenosa) que se forma alrededor de un candidato «presidenciable».
Lo que más me gustó: Clooney se atreve a hablar de lo que muchos callan.
Lo que menos me gustó: El protagonista es un jefe de prensa que a veces actúa como director de comunicación o, incluso, como jefe de campaña. Son responsabilidades muy distintas. Este intercambio de roles da juego argumental a la cinta, pero queda muy alejado de la vida real.
El cuarto poder (The fourth state, Liz Garbus, 2018). Documental de cuatro capítulos que analiza la tensa relación entre Donald Trump y la prensa que él no considera afín, como The New York Times.
Lo que más me gustó: Para cualquier periodista el Times es como jugar en la NBA. Conscientes de que la mayoría de los mortales no terminaremos en ese valhalla, se agradece que nos lleven de la mano por las tripas de la redacción y conozcamos cómo son las mujeres y hombres que trabajan en él. The New York Times es más que un periódico: es una institución que comunica sobre sí misma, como si fuera el ministerio de un país o una organización supranacional.
Lo que menos me gustó: La primera lección que me enseñaron en la Facultad es que el periodista es un servidor público (como un bombero, un médico o un conductor de ambulancias) y todo vedettismo es contrario a la profesión. A veces a los redactores del Times se les olvida esto. Pero, caramba, si tú trabajaras en el mejor periódico del mundo, ¿no irías caminando sobre las nubes?
El gran hackeo. (The great hack, Karim Amer y Jehane Noujaim, 2019). Para verlo una y otra vez. Cuenta cómo Cambridge Analytica fue capaz de influir en los votos de las personas en el Brexit o en la primera campaña presidencial de Trump. La desinformación está ahí. Con pruebas. Y, sin embargo, parece que la toleramos.
Lo que más me gustó: Es un documental muy didáctico, que explica a la perfección el escándalo Cambridge Analytica. Pone el foco sobre periodistas y activistas hasta entonces desconocidos.
Lo que menos me gustó: El ritmo de los primeros minutos es muy lento.
Ted Lasso. Esta comedia desarrolla la historia de Ted Lasso, un entrenador de fútbol americano de segunda división, que viaje desde Kansas a Londres porque es contratado para ser entrenador de fútbol europeo. Lasso no tiene ni idea de fútbol europeo, pero le apasiona el reto. Lo que él no sabe es que es contratado, precisamente, para que lo haga muy, muy, muy mal y el club se hunda.
Lo que más me gustó: La humanidad que rodea a toda la serie. Entre las tramas secundarias, refleja las relaciones entre el director de comunicación y deportivo del club, la jefa de prensa de algunos jugadores y los periodistas deportivos británicos que, como todos sabemos, son una de una clase aparte.
Lo que menos me gustó: Que no haya una temporada más. Ya en serio: Al director de comunicación se le llama luego «director de operaciones deportivas», a la jefe de prensa de algunos jugadores se la denomina luego «directora de marketing». Detalles que revelan que esa parte de la historia no se ha cuidado o que no les importa.